Zitiervorschlag: Anónimo (Hrsg.): "Carta IX", in: El Corresponsal del Censor, Vol.1\09 (1786-1788), S. 121-136, ediert in: Ertler, Klaus-Dieter / Hobisch, Elisabeth (Hrsg.): Die "Spectators" im internationalen Kontext. Digitale Edition, Graz 2011- . hdl.handle.net/11471/513.20.45 [aufgerufen am: ].


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Carta IX

Zitat/Motto► En la eleccion del Estado
dan fuero humano y divino
la proposicion al Padre
y la aceptacion al hijo.

Moreto: Comedia: El Lindo Don Diego. ◀Zitat/Motto

Ebene 2► Metatextualität► Señor Censor.

Una Señorita joven, bien educada, y en quanto á su belleza favorecida á manos llenas de la fortuna, me ha escrito la siguiente Carta; léala Vmd., escriba contra el abuso de semejantes violencias, compadézcala, y mándeme. ◀Metatextualität

Ebene 3► Brief/Leserbrief► Metatextualität► [122] Señor Corresponsal del Censor.

Muy Señor mio: En nada acreditan mas los Caballeros su nobleza, que quando la emplean en amparar y obedecer á las Damas; y con nada tampoco quedan mas suficientemente pagados que con que estas les presenten ocasiones de lucimiento.

Zitat/Motto► Pues recompensas mayores
no es posible hallar, que darle
en que lucir á lo noble. ◀Zitat/Motto

Hecha yo cargo de esto, y de que dará Vmd. al público noticia de mi infeliz estado, para lograr á lo menos la triste satisfaccion de que me compadezca, he determinado comunicársele, suplicándole disimule el melancólico rato que le ocasionaré con su noticia. ◀Metatextualität

Ebene 4► Allgemeine Erzählung► Hace tiempo que un joven digno de todo mi amor me declaró [123] con la mayor modestia el suyo. Sus nobles prendas, su amable presencia, su talento y sus medianos posibles, me obligaron á no dexar de mantener su llama con mi correspondencia: pensábamos declarar nuestra idéa á mi tio, quien nada habia advertido de la pasion que uno por otro alimentábamos en nuestro pecho, porque no eramos amantes del calibre que otros, ni nos persuadíamos á que para querernos fuese precisa circunstancia dar cuenta á todo el mundo con nuestros ruidosos transportes, no pensando como muchos que el matrimonio debe ser la última aventura del amor, discurriendo que si en la carrera de estas pretensiones no hay algo de escándalo, es tibio el cariño, porque vemos hoy que en el ceremonial del cortejo lícito ó ilícito, quien no busca á su objeto en el templo, en el paseo ú otro parage público, ni dá en qualquiera de ellos con sus [124] acciones y gestos mucho que reír, y muchísimo que murmurar, se le incluye en el número de los amantes patanes; tomando la circunspeccion, la modestia y el modo por tibieza; sino está melancólico y pensativo, es galan de burlas; sino hace al dia diez visitas á su amada, si en cada una de estas no suscita alguna qüestion amorosa, sino escandaliza á los criados y vecinos, y si en el teatro, bayle ú otra qualquiera concurrencia no está eternamente hablando á su ídolo al oido, gesticulando y riyendo á carcajadas, se le figura que no cumple con su obligacion, y que todos le considerarán por muy poco impuesto en el codigo de la galanteria: resultando de aqui mantener la opinion de que no se puede contraher con gusto un matrimonio quando le faltan las circunstancias de la persecucion de los Padres, la de zelos formados baxo falsas apariencias, las quejas, las [125] desesperaciones, los tactos, y casi casi lo que sigue; y que principiar á amar ó formar el amor al mismo tiempo que las capitulaciones, tomando, como decia un discreto, el romance por la cola, es mas propio para un contrato mercantil que matrimonial.

Metatextualität► Me he distrahido involuntariamente de mi asunto; pero volviendo á tomar el hilo de él, digo; ◀Metatextualität que quando estabamos el idolatrado dueño de mi corazon, y yo determinados á dar cuenta á mi tio de nuestro intento (felices ya con la esperanza de su logro), entró su merced en mi quarto una mañana proponiéndome para esposo Ebene 5► Fremdportrait► el hijo de aquella viuda rica Metatextualität► que Vmd. conoce, y de quien hemos hablado varias veces. Ya sabe Vmd. que objeto tan despreciable es dicho sugeto: No contando con el poco cuidado que mereció á la naturaleza, pues á Vmd. le consta lo deforme de toda [126] su humanidad, ◀Metatextualität es soberbio, vicioso, necio y brutal en todas sus acciones y pensamientos: hijo de viuda. ◀Fremdportrait ◀Ebene 5

Como yo tenia todo mi corazon entregado al joven que dexo dicho, y como era imposible borrar de él su imagen, respondí con la mas humilde moderacion lo repugnante que me era este lazo, por no hallar en dicho sugeto prenda que no fuese digna de abominacion y desprecio; que al ver aquellos brutales modos que tenia con su madre, aquella elacion con todos de que era buen testigo su merced, y aquella disipacion de sus intereses en juego, vino y mugeres, le constituian odioso á mi voluntad; y que asi no quisiese unirme con una persona, cuyo corazon estaba tan corrompido: que el matrimonio era un estado tan lleno de sinsabores, que aun efectuado con gusto de los contrayentes, siempre se hallaban en él mayor [127] número de espinas que de rosas, y que considerase quantas serian aquellas hecho á disgusto: que yo pensaba seriamente en salvarme, y que el sugeto que me proponia solo era capaz de hacer infelices mis dias, y aun de faltarle á aquella sagrada fidelidad á que es tan acrehedor un esposo, resultas casi infalibles de tales violencias.

Procuró mi tio vencer la rebeldia de mi corazon con razones comunes, Ebene 5► Dialog► diciéndome; que el nuevo estado le mudaria el natural y las costumbres, que el sagrado nudo, el lecho y el tiempo (sin hacerse cargo que el tiempo es el mas cruel asesino de la pasion del amor) cambiaria en este, ó á lo menos en amistad la diversidad de genios de dos esposos; que era rico, y consiguientemente acrehedor á mi consideracion.

Experimento, le repliqué, una aversion tan grande á ese sugeto por quien se halla Vmd. tan em-[128]peñado, que ningun tiempo es capaz de dexar que le mire con horror: todas sus riquezas no me quitarian el martirio de por vida que forzosamente habré de sufrir siendo su esposa. Quando en los matrimonios no hay mas que amistad, quando no se aman con ternura los que le han abrazado, y quando las satisfaciones y disgustos no son perfectamente recíprocos, está mal acoplada aquella union. ¿Hé de verme yo obligada hasta la muerte (que continuamente estaré deseando por considerarla término de mis infelicidades) á hacerme criada del que aborrezco? ¿Y ha de estar siempre con máscara mi corazon fingiendo un amor que no tengo, ni podré tener? ¿El tálamo y la mesa que debe ser el teatro de las mayores y mas dulces satisfacciones, serán otra cosa que del desvío, del disgusto y del horror? ¿No hay mas que decir; ahí tienes ese hombre para marido, para que sea tu due-[129]ño, y á quien has de estar sujeta hasta la muerte, le has de amar, aunque tu voluntad lo repugne, acordándole siempre que guste los últimos y mas preciosos favores? ¡Santo Dios! ¿con qué placer podré desempeñar obligaciones que me serán tan odiosas? ¿Cómo he de manifestar un semblante risueño y un ánimo tranquilo al mismo tiempo que mi alma esté hanegada en el mas amargo llanto? horror á mi esposo : : : amor á otro : : : virtud en mí : : : ¡Ah tio qué terrible contraste! ¡y qué digna de compasion es qualquiera muger casada, virtuosa, apasionada y no de quien debe estarlo! ¡Cómo podré sufrir las finezas de la obligacion de mi consorte, quando le aborrezco! ¡Ah qué dolor! Tio mio, no quiera Vmd. sacrificar esta inocente víctima. El pesar que me causa su empeño, le están manifestando las lágrimas que corren por mis mexillas, la palidez que se apoderó [130] de mi semblante desde el momento que Vmd. me ha declarado su intencion, y finalmente la misma repugnancia mia á su gusto, quando tiene repetidas pruebas de que jamás he tenido otro que darsele en todo.

Mal se advierte, me replicó con una vista torba y ferino semblante, que quieres dármele, quando te hallas tan tenáz en no querer asentir á lo que te propongo; previniéndote por último que es forzoso obedecerme, que soy tu tio, acaudalado y dueño de dexar por heredero á quien quiera, que de ningun modo pienso seas tú sino asientes á mis intenciones; y con estas últimas palabras se salió de mi quarto, dexándome llena de confusion y temor. ◀Dialog ◀Ebene 5

Todo aquel dia y siguiente se advertia en el semblante de mi tio una mezcla de afecto y desvío ácia mí, causado de que dudaba si permaneceria constante en mi opi-[131]nion, ó si por el temor de que me abandonase, seguiria la suya, y asi los pasé llena de dudas y sobresaltos, quando al tercero, vino á verme un amigo suyo, confidente y consejero, el qual á pocas palabras que habian corrido en la conversacion introduxo el empeño de mi tio, representándome oráculamente las ventajas que se me seguian de resignarme á su gusto, las desventajas de lo contrario, Ebene 5► Dialog► diciéndome que, aun quando el propuesto mereciese toda mi aversion, y fuese para mí la persona mas repugnante, mi principal obligacion era la de obedecer. ◀Dialog ◀Ebene 5

Al escuchar proposicion tan escandalosa toda la natural moderacion de mi ánimo no fue capaz de contenerse, ni aun en unos regulares límites; Ebene 5► Dialog► y asi le repliqué, diciéndole; me admiraba su estilo y opinion, me admiraba se mezclase en asuntos que de ningun modo le competian, y me admiraba, ó por [132] mejor decir me escandalizaba se empeñase en hacer infeliz á una criatura que en nada le tenia ofendido, y últimamente, que no continuase en su empeño, porque saldria desairado de él, ni que en lo succesivo me favoreciese mas con sus visitas, pues me servian de cortísima satisfacion: que era cierto pendia mi subsistencia de la voluntad de mi tio, pero que no le consideraba tan cruel que me abandonase, porque discordasemos en aquel particular; y que respecto no tenia heredero mas forzoso que yo, estaba muy distante á persuadirme que por un asunto de tan corta consideracion, y en que la razon se hallaba tan de mi parte, me dexase expuesta á los riesgos de que está rodeada una joven huérfana, pobre, y si no linda, tampoco fea, pues no me desconocia tanto, que no creyese ser muy capáz de merecer algun cuidado á los hombres. ◀Dialog ◀Ebene 5

Al oir estas últimas razones se [133] levantó, Ebene 5► Dialog► y diciéndome solamente: No se queje Vmd. de lo que la sobrevenga; ◀Dialog ◀Ebene 5 pasó inmediatamente al quarto de mi tio donde estuvieron hablando mas de dos horas.

Todos los dias que pasaron desde este hasta aquel en que se verificó la muerte de mi tio, fueron para mí aciagos y tristísimos; aquel amor que antes me manifestaba, se convirtió en ódio; me mandó entregarle las llaves de baules y dispensa; no me permitió comer mas á la mesa con su merced, tampoco salir de casa sino á cumplir con las precisas obligaciones de Christiana. Experimentaba una maligna satisfacion quando me injuriaban los criados; no hubo desprecio ni maltrato que no exercitase conmigo, no me hablaba, ni permitia que le viese, y para complemento de todas mis desdichas murió aquel joven de quien dixe á Vmd. me hallaba tan apasionada. ¡Triste memoria!

En esta lastimosa y deplorable [134] situacion me mantuve tres años hasta que al fin de ellos se sirvió Dios llevarle para sí. En el curso de su enfermedad, que fue dilatada, rogué llorando muchas veces al consabido amigo suyo me permitiese asistir y ver al enfermo, pero fueron vanas todas mis súplicas. Inexôrables este y el paciente á mis justos ruegos, viví envuelta en dolor y desesperacion todo el tiempo que duró el mal; se agravó este, el Médico corporal le previno se dispusiese, confesó y recibió á su Magestad con la mayor edificacion segun dixeron, pues á mí no me era permitido verle, dispuso su testamento cerrado, y murió.

Luego que una criada vino al gavinete en que me hallaba retirada á comunicarme esta triste é infausta nueva, pase inmediatamente, guiada del dolor y afliccion al quarto del difunto para cerrarle los ojos en prueba de mi afecto, y besarle los pies en la de mi respeto; [135] pero ni aun este consuelo se me acordó, mandándome al instante el citado amigo que recogiese algunos trastos si los tenia, y me saliese luego luego [sic] de la casa, pues no le habia en ella mas escusado que yo.

Ebene 5► Dialog► ¿Cómo es eso, le repliqué, pues mi tio, mi amado tio dexa cláusula tan cruel en su última disposicion? No Señora, me dixo, no dexa mandado eso, pero lo mando yo, y para que Vmd. vea lo inutil que es su persona en esta casa, escuche el testamento que ha dexado dispuesto. ◀Dialog ◀Ebene 5 Empezó á leerle el Secretario, y oigo dexa destinados diez mil pesos para que se edifique una Capilla á no sé que Santo, en no sé que Convento; que se digan por su alma quatro mil Misas, que acompañen su cuerpo quantos Religios y Sacerdotes hubiese en la Ciudad al tiempo de su fallecimiento, y que del remanente dispusiese su consabido amigo, á quien dexaba declarado el uso que debia hacer de él.

Ebene 5► Dialog► [136] Podré tener, le pregunté, alguna esperanza de que me toque algo de ese remanente? No Señora, me respondió, ni un maravedí. Todos me compadecieron; y hasta el Escribano dió como señas de que sentia el abandono en que yo quedaba. ◀Dialog ◀Ebene 5 ◀Allgemeine Erzählung ◀Ebene 4

Metatextualität► Este es Señor Harnero el estado en que me hallo, sin tener al presente otro alivio en mi cuita que el que me proporcionó aquel Caballero amigo de Vmd., en cuya casa estoy de limosna. Sin embargo que mi tio me ha dexado abandonada, expuesta á mil riesgos, y hecho de sus caudales el uso que no debia, me templa mucho este dolor el consuelo de que ha muerto su merced con todos los Sacramentos, que hubiese dexado tantas Misas por su alma, como tambien la gran suma de dinero para construccion de la mencionada Capilla.

Siempre apasionada de Vmd,

Maria de los Dolores. ◀Metatextualität ◀Brief/Leserbrief ◀Ebene 3 ◀Ebene 2 ◀Ebene 1