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Zitiervorschlag: Anonym (García de Cañuelo, Luis; Pereira, Luis Marcelino) (Hrsg.): "Discurso CXVII", in: El Censor, Vol.6\117 (1786), S. 923-940, ediert in: Ertler, Klaus-Dieter / Hobisch, Elisabeth (Hrsg.): Die "Spectators" im internationalen Kontext. Digitale Edition, Graz 2011- . hdl.handle.net/11471/513.20.521 [aufgerufen am: ].


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Discurso CXVII

Zitat/Motto►  . . . . . Brevis esse laboro,
Obscurus fio . . . . . 

Horat. A. P. v. 25.

Por procurar ser breve me hago obscuro. ◀Zitat/Motto

Ebene 2► Ebene 3► Brief/Leserbrief►Señor Censor: ningun asunto me parece mas propio ni mas digno de su Obra, que el que he tratado en mis tres cartas antecedentes, y que concluiré en esta. Si es que Vm. se ha propuesto otro fin que el de divertir meramente á sus Lectores con sus papeles, ó deleitarlos mo-[924] viendoles la risa ú otra pasion; efecto incapaz de conseguirse siempre que para su inteligencia sea necesaria alguna atencion y reflexion, y por consiguiente algun trabajo: y si es que quiere Vm. convencer á todo el que quiera tomar el poco que para ello se necesita, de la principal, por no decir de la única, causa de los males de toda especie que afligen á los Particulares y á los Pueblos, la qual sin tirar á remediarla no será mas que un puro entretenimiento quanto Vm. y todos los Autores puedan decirnos acerca de las costumbres, o de las virtudes y los vicios; deberá Vm. sin duda no solo dar a luz mis cartas, aunque hayan de desagradar al mayor numero de Lectores, sino escribir otros mil Discursos sobre su mismo contenido, tratando el asunto, si acaso llega á tanto su habilidad de Vm. con la amenidad y gusto que á mí me ha sido imposible. [925] Para eso va ya vencida la principal dificultad: quiero decir, que ya tiene Vm. hechos los cálculos necesarios para demostrar y convencer en la materia; y podrá Vm. dirigirse únicamente á persuadir deleitando. Demás de que yo no creo haya alguno á quien no divierta la curiosidad de ver ó entender como el oro y la plata, que ni se come ni se viste, ni se siembra, pueda no obstante, ó saliendo una porcion de él fuera de la nacion, y tomando la restante cierto giro dentro de ella, ó entrando en ella por ciertos conductos, y no por otros, aumentar las producciones de todo lo necesario para comer y vestir; y aumentar por consiguiente los hombres mismos. ¿No es tan oro y plata el que se extrae de la mina como el que entra por el comercio? Pues ¿por qué no tiene el mismo efecto? ¿Por qué este efecto es mayor si el dinero se recibe en cambio de manufacturas, que en [926] cambio de frutos de la tierra? ¿En qué consiste esta diferencia? ¿Qué mas hace que el oro y plata se halle en estas ó las otras manos? ¿Cómo el empobrecer á unos individuos de una nacion puede ser el único medio de enriquecerlos á ellos mismos, y á todos los restantes; esto es, á la nacion entera? He aqui unos problemas tanto ó mas curiosos que los mas curiosos de la Fisica: de cuya resolucion pende en gran parte ó en el todo, toda la ciencia de la Economía política; y que seguramente muchos de los que mas se precian de entenderla no los tienen hasta ahora bien resueltos. Estos son pues y otros muchos semejantes los que me parece resuelvo yo, o pongo en parage de resolver, demostrativamente en mis quatro cartas.

Solo me queda que hablar en esta del comercio activo; y hacer ver: como no de otro modo enri-[927]quece hoy á la nacion que lo hace, sino aproximando á la igualdad de riquezas á las clases que la componen. De lo dicho y de lo que queda por decir se inferirá facilmente, que el comercio mixto de pasivo y activo tanto mas enriquecerá á una nacion quanto mas participáre de la naturaleza del segundo: que el activo le será mas útil que las permutas de mercadurias por mercadurias; y que si vende á dinero frutos de la industria, le será mucho mas ventajoso, que si vende frutos de la tierra. En una palabra, se podrán facilmente resolver todos los problemas pertenecientes á la naturaleza del dinero, y del comercio; los que hace tan complicados el estanco de los bienes ó de las riquezas.

Ebene 4► En la carta antecedente supusimos una nacion en la qual todas las riquezas se hallaban estancadas en poder de cien propietarios. Supon-[928]gamos ahora la misma; é imaginemos que sin hacer antes ningun comercio exterior; comienza ahora á hacerlo activo con otras naciones, porque por una casualidad feliz para ella, estas se han hallado en una necesidad de sus manufacturas ú otros generos igual ó mayor que la que se tiene dentro de ella; de suerte que los fabricantes y demás que trabajan en su produccion no reciben por sus obras menor precio del Extrangero que del Natural. Supongamos tambien para simplificar la qüestion; que esta nacion no compra cosa ninguna á las otras; y que todo lo que vende lo vende á dinero, por manera que todo el que recibe permanece dentro de ella sin invertir aun la porcion mas pequeña de él en comprar á otra nacion cosa alguna ni aun de las mas necesarias á la vida: esto es, que no hace otro comercio que puramente activo. Digo pues, que á pesar de [929] la esterilidad del dinero, y á pesar de su inutilidad para representar cosa alguna fuera de la nacion misma (como hemos supuesto) esta nacion no obstante tanto mas enriquecerá, quanto sea mayor la porcion de oro y plata que entre en ella por el comercio. Un Particular que aumentase diariamente la masa de su dinero; si suponemos que jamás hubiese de hacer uso de él entregandolo á otro Particular; tan lexos estaria de enriquecer, que por el contrario diariamente empobreceria, porque diariamente se privaba de alguna cosa necesaria o útil, esto es, de alguna riqueza verdadera por obtener diariamente los signos de ella, que como suponemos, para él no eran signos, ó no le representaban nada. Mas una nacion aunque jamás haya de entregar á otra ninguna; ninguna porcion de su oro y plata; aunque nada fuera de ella le representen estos metales; no obs-[930]tante tanto mas aumentará las cosas necesarias y útiles, las verdaderas riquezas, quanto mas aumente sus signos por la via del comercio. Veamos ya la razon.

Procediendo siempre en la suposicion hecha; es claro que este efecto lo causará el comercio no porque de nuevo se hayan aumentado las necesidades de los propietarios dueños del estanco, sino porque tanto mas les urgirán que antes las mismas que ya tienen y satisfacen, quanto el comercio activo sea mayor.

Es constante que no podian fabricarse ó producirse antes en esta nacion mas manufacturas ó generos que los que dentro de ella se consumian, y por consiguiente se tenia necesidad de ellos; y que todos los que se consumian eran pagados por los propietarios, ó inmediatamente por sí mismos, ó mediatamente por otros que las paga-[931]ban con lo que de ellos recibian. Porque no hay medio alguno: de los propietarios del suelo ó de derechos sobre el suelo ha de venir á salir en su primitivo origen todo aquello con que una nacion paga lo que consume, ya que se produzca dentro, ya que se produzca fuera de ella.

Siguese de aqui lo primero: que si la misma necesidad de los generos que el Extranjero extrae ha de continuar siendo satisfecha dentro de la nacion; no puede ser sino á mayor costa de los propietarios que antes; pues que tanto mas habrá subido el precio de estos generos, quanto la extraccion sea mayor.

Para pagar este mayor precio se verán obligados á invertir en ello lo que consumian en la satisfaccion de algunas otras necesidades. Pero estas necesidades que dexen de satisfacer nunca serán tan grandes ni tan urgentes como la de los gene-[932]ros ó frutos que el Extrangero extrae, pues si lo fuesen es claro que no dexarian de satisfacer las mayores por satisfacer las menores.

Pasará pues de sus manos á la clase de aquellos que contribuyen á la produccion ó existencia de estos generos ó frutos que se lleva el Extrangero, y que son de una necesidad mayor ó mas comun y extensa, una porcion de dinero mayor que la que antes pasaba: por haberse augmentado el precio de estos generos por dos razones, la primera porque ha crecido el numero de los que los necesitan y los piden, y la segunda porque ha enriquecido ó posee ahora mas dinero que antes la clase de los que los fabrican y concurren de otro modo á su produccion.

La mayor ganancia en esta clase atraerá á ella un numero de hombres igual ó mayor á el en que se disminuyeron las otras clases pro-[933]ductoras de nada, ó de cosas menos necesarias ó útiles. Este aumento disminuirá el valor de la industria y trabajo de cada uno; y disminuirá el valor de la mercancia. Pero como este valor siempre será superior al que antes de la extraccion tenia, por ser la clase toda mas rica entrando en ella no solo el dinero que antes no entraba del Extrangero, sino tambien la mayor cantidad que sus generos han costado á los propietarios naturales; siempre irá pasando mayor cantidad que antes de estos á aquellos.

Si han de continuar pues satisfaciendo la misma necesidad de los generos que el Extrangero saca; es forzoso que traten los propietarios de volver á recoger de esta misma clase ó de otras el dinero que de sus manos ha pasado á ellas; pues de otro modo llegaria el caso de disminuirse su dinero hasta no tener con que satisfacerles sus obras, [934] y privarse de la necesidad de que hablamos.

Será pues preciso para esto que vuelva á los propietarios mayor porcion del dinero de estas clases que la que antes volvia; y por lo tanto es forzoso que las ofrezcan mayor cantidad de cosas mas necesarias y útiles para ellas que las que ellas mismas venden, de la que las ofrecian antes; y para esto no tienen otro medio que el de hacerlas nuevamente producir pagando el trabajo que para esta nueva produccion se necesita con lo que pagaban antes el que empleaban en obras de una necesidad ó utilidad menor que la de las cosas que el Extrangero saca.

Volverá a los propietarios no solo el dinero que salió de sus manos, sino todo el que entra del Extrangero en la nacion, porque efectivamente por sus manos ha de pasar todo el que en una nacion circula. [935] Pero no volverá sin que ellos aumenten las producciones de cosas mas necesarias ó útiles; único conducto por donde ha de correr á ellos el dinero que pára en las demás clases. Pues si no lo abriesen por medio de nuevas producciones, las otras clases que poseen mas dinero del que necesitan para pagar lo que de ellos reciben, se surtirian del Extrangero, ó no recibirian de él por sus obras oro ó plata, sino frutos.

Los propietarios no harán producir mas frutos que los necesarios para atraer á sí el dinero que entra del Extrangero en manos de las otras clases; y atrayendolo serán mas ricos que ellas en la misma razon que antes del comercio, aunque, absolutamente hablando, los propietarios y estas clases han aumentado sus riquezas. Pero si suponemos que siga el mismo comercio; volverá á entrar igual cantidad de dinero del Extrangero en estas cla-[936]ses: volverá á disminuirse en igual razon el valor del que poseen los propietarios con relacion al de estas clases: volverán estas á ser mas ricas, y aquellos mas pobres comparativamente los unos á las otras: volverá á aumentarse el precio de las obras que estas producen: volverá á urgir mas á aquellos la necesidad de ellas: y volverán á verse obligados para satisfacerla á hacer producir nuevos frutos. En una palabra, volverá la misma circulacion que he descrito, y con ella irá creciendo la producción de cosas mas útiles ó necesarias que las que el comercio extrae; hasta tanto que los propietarios no puedan ya satisfacer la necesidad de estas cosas, y para ello aumentar la produccion de aquellas, sino á costa de dexar de satisfacer otras necesidades que les urjan ya mas que la de los generos que el Extrangero saca.

Este caso llegará tanto mas pron-[937]to, quanto el estanco de los bienes sea mayor. Porque quanto el estanco es mayor siendo tanto mas pobres los propietarios todos, ó la clase de ellos; á causa de ser menor la suma de las necesidades de todos, y por consiguiente menor la produccion de riquezas reales; quanto mayor es el estanco, menos son tambien los medios de satisfacer otras necesidades que les costasen mas de lo que les costaban otras que satisfacian: aunque quanto mayor es el estanco, tanto mas rico sea cada propietario en particular, ó la clase entera de ellos relativamente á las otras clases; y tanto mayores sean para ellos las necesidades quanto mayores son para los demás; y al contrario, las menores para estos sean mayores para ellos. Y aun esta es la causa por qué á cada uno de los propietarios le cuesta mas la satisfaccion de una necesidad, quanto esta para los otros es menor, ó nula.

[938] Dexando de crecer la necesidad de los generos que el Extrangero saca, se fixará su precio, aunque se consumirán los mismos; pues que no siendo necesidad la que no puede satisfacerse sino dexando de satisfacer otras que urjan mas, esta necesidad no puede ya obligar á los propietarios á ofrecer mas de lo que ofrecian por estos generos. Asi se fixará tambien, y no crecerá mas el precio que por ellos paga el Extrangero: y todo el dinero que entre en la nacion per este comercio, ó pasará á manos de los propietarios sin haber aumentado el valor del que poseían las demás clases, esto es, con inutilidad, ó con daño de ella; ó pasará al Extrangero en cambio de otros generos que de él se obtengan mas varatos que dentro de la nacion misma; esto es, con provecho de ella, aunque no tanto; y que tampoco podrá crecer, como he probado en la carta sobre el co-[939]mercio pasivo.

Vease aqui como á las ventajas que el comercio activo trae á una nacion por el único medio de impeler ácia la igualdad de riquezas con la de los propietarios á las clases productoras, sirve finalmente de límites el estanco de los bienes: el qual quanto es mayor da un valor mayor á cosas que sin él no lo tendrian, ó le tendrian menor; y por consiguiente mantiene tanta mas industria ó trabajo que nada producen, ó producen cosas de una necesidad ó utilidad la menos extensa y comun: necesidad que no obstante es tanto mayor para aquellos que todo lo han de producir, quanto su numero es menor, y por ello son tanto mas ricos. ◀Ebene 4

Creo, Señor Censor, haber demostrado que el comercio no enriquece á un Estado de otro modo, que aproximando ácia la igualdad de riquezas á las clases que le com-[940]ponen con la de los propietarios dueños del estanco: el qual quanto es mayor tanto mas presto limita este efecto. Ahora vea Vm. si esta misma aproximacion no podria lograrse deshaciendo el estanco en sí mismo; y dando el golpe en la raiz del mal. Considere Vm. bien esto; y haga ver á todos; que intentar otro medio de enriquecerlos á nosotros es intentar una cosa imposible: pues es una quimera pensar, que la nacion que tiene el mayor estanco que se conoce en Europa, pueda hacer un comercio activo con las que lo tienen menor, ó desbancar á esta del que hagan con otras naciones que tengan mayor estanco que nosotros. No cese Vm. de inculcar en sus Discursos esta verdad importante, y levante Vm. el grito sobre ella. Nuestro Señor &c.”

N. Philopatro. ◀Brief/Leserbrief ◀Ebene 3 ◀Ebene 2 ◀Ebene 1