Prosigo haciendo ver, que el origen de las
Naciones mas se deduce de la similitud y conexîon de sus lenguas y
costumbres, que de lo que nos dicen y dijeron los
Historiadores.
A la segunda generacion otras nuevas Colonias revestidas de igual autoridad hicieron lo mismo por los inseparables principios de la potestad paternal. Todos los dias se estan viendo entre los hijos de un mismo padre distintos rostros, distintos genios, distintas voces y sonidos, por la diferente configuracion de los organos de la boca; si á esto se añaden los efectos de la poligamía, y los diferentes acentos de las madres yá indigénas, yá esclavas, yá extrangeras, apenas se conocerán sus hijos, luego que se trasladen á otros parages á la tercera generacion.
Dentro de casa tenemos el exemplo. obscuras, y acentos nunaritos y dentales, de que abunda este nuevo idioma,
valiendose para expresarlos de una mezcla y convinacion de letras que á
todos aburre. Mas si le llamo nuevo, es por el inmediato principio que
se le alcanza, no siendo sinó un nuevo dialecto de nuestro Gallego, que
se conserva y conservará puro, mientras no se escriba.
Responden, que las lenguas se corrompen y forman de nuevo por el comercio
y confusion de unas Naciones con otras; y que entonces el uso ó el abuso
vá desfigurando las palabras y los modos de hablar insensiblemente,
hasta que por acaso y de improviso se hallan establecidas. Los que asi
piensasn y discurren no están muy distantes de creer, que el Mundo y el
Hombre se han for-
¡O Fortuna! exclamó en estos dias un General
Francés al llegar á ¡Cinco
horas no mas necesito que me concedais de tiempo! Expresion que
parece propia de un Atheista, pero que no la conozco por tal en este
grande hombre; porque los Filosofos del dia por mas que forcejen y
deliren, no pueden dejar de entender bajo la denominacion de Ente, Fortuna, Naturaleza ó Providencia esta Mano
superior, invisible, y omnipotente, que nos sufre, y nos espera; y si
hay alguno que lo dude, bastale que alze los ojos al Cielo, que por
tantas bocas nos habla, ó baje su consideracion al centro de la tierra,
que no menos nos avisa por otros tantos Crate-Lago por toda la
circunferencia del Globo.
Pero yo me hé desviado, Señor Editor. Asi es, y lo confieso, porque no
llevo mas objeto en este escrito que el desengaño de mis hermanos.
Inventores. En todo ese espacio ¿que comercio no han tenido
los Catalanes y Gallegos, y todas las Provincias de España entre si y
con los extrangeros, sin que hasta ahora resultase esa supuesta
confusion? ¿Quantos matrimonios, alianzas, y transmigraciones se
hicieron y hacen cada dia entre Franceses, Italianos, y Españoles,
Portugueses y Gallegos, Vizcaínos y Castellanos, Valencianos y
Aragoneses, sin que dejen de ser sus idiomas lo mismo que son y fueron
en esos 600 años? ¿Y porque no sería lo
Responden, porque desde que el Romance Castellano se hizo dominante, y
lengua de Corte, todos se conformaron con el, dejando aisladas y á salvo
las lenguas Provinciales en sus Cantones. Bien ¿y antes de aquellos 600
años no havia tambien una lengua dominante, que era el Latin corrupto?
Si Señor; pero ese lenguage era extrangero y artificial, que necesitaba
de estudio, y por lo mismo tenia aburridos á los Españoles, que
corrompiendolo lo fueron olvidando, y formando los que hoy exîsten. Esta
respuesta confesará el Sr. Maestros, acentos, y modulaciones
incompatibles con el Latin corrupto y por corromper.
Pero valga la verdad. Si las lenguas Provinciales exîstían en el Reynado
de los Señores Reyes Católicos, es decir, á la expulsion de los Arabes;
si exîstían
Dice el Sr.
Lo que debe creerse es, que habria Monos, como los hay en todos tiempos, que afectasen hablar y firmar en Arabe, desdeñandose de explicarse en su idioma vulgar. Los Arabes nunca han forzado à los Españoles en su Religion, en sus Leyes, y costumbres, ni menos en la imposibilidad de olvidar sus lenguas. Dejaronnos si muchas voces, muchos conocimientos, y el acento gutural que se conserva en las Andalucías; pero los nacionales, aún aquellos que les estaban subditos y hablaban Arabe, no pudieron olvidar jamás su idioma nativo.
Y hé aqui como el arribo de los Arabes, es decir, en tiempo de los
Pelayos, y Rodrigos, á principios del Siglo VIII, es preciso confesar
que los Gallegos y Vizcaínos conservaban su lengua, los Catalanes la
suya, y los
Hablo de
Hablo del Privilegio de
Hablo por las Constituciones del Orden de la Espada de
Luego los Romanos á su arribo á España hallaron nuestras lenguas Provinciales, quales ellas son y fueron en tiempo de los Arabes y de los Godos, sin que pueda creerse que se formaron por acaso del Latin corrompido, ni del puro antes de corromperse. Lo unico que creo, y debo confesar ingenuamente, es que nuestras primeras Colonias, viniesen por mar ó por tierra, debieron traher su ascendencia de las Francesas ó Italianas, por la anexîon que noto entre el artificio de estas lenguas con las nuestras, y por consiguiente hé llegado á descubrir quales eran las lenguas originales de los Españoles, Ingleses, Italianos, y Franceses, desenterrandolas de la obscuridad en que la aprehension de una antiguedad remota las tenia ocultas.
Esperad, los Griegos […], Esperides, y
los Latinos Spanias, porque las marca al
Occidente, no crea tenga ahora el mismo influxo para volver á
iluminarlas desde un rincon de